Los educadores de Las Naves salieron el pasado  miércoles, tras impartir las clases a los chicos, para compartir tiempo de calidad juntos alrededor de una mesa para comer y, posteriormente, jugando en la bolera.

El juego es uno de los métodos que aplicamos para acompañar en su aprendizaje a los chicos y chicas de Las Naves, por lo que también nosotros debemos saber sacar al niño o niña que llevamos dentro.

Estos encuentros son necesarios para que podamos ser una piña en la que todos trabajamos con el mismo objetivo y deseo de ayudar, con mucho amor, a los chicos y chicas que dan vida a nuestro centro educativo y juvenil.